Para nosotros San Martín era
valiente, decidido, arriesgado, con carácter firme y aspecto perseverante.
Creemos que era
valiente, porque se atrevió a arriesgar su vida por la patria. Creemos que era
decidido porque se decidió definitivamente a luchar por la patria. Era
arriesgado porque se atrevió a cruzar un camino que nadie más se atrevió a
pasar. Tenía carácter firme porque tenía firmeza al entrenar y controlar a los
soldados. Su aspecto perseverante lo vemos en que nunca se rindió, aunque en
algunas decisiones no estaba seguro, nunca dudó en pelear para liberar a otros.
Una de las hazañas
más importantes de San Martín fue el cruce de los andes, dicho así no parece
tan difícil. Se calcula que pasando los andes el cuerpo del ejército tenía más
de doscientas personas, entre ellas jefes y oficiales. El cruce de los Andes
fue una gran hazaña, pero también fue una obra de arte, algo minuciosa y
delicadamente preparada hasta en sus menores detalles. Las dos columnas
principales eran las que comandaba Las Heras y las que comandaba Soler,
cruzaron en Enero de 1817, la primera por Los Patos y la otra por Uspallata.
Decimos que cruzar
los Andes fue una obra de arte porque en esos tiempos los mapas no eran
perfectos, no eran exactos. Actualmente los mapas se hacen por
satélite, pero antes se hacían explorando y dibujando el mapa, detallándolo.
San Martín
no tenía cosas que lo convirtieron en un héroe, hizo cosas que lo convirtieron
en un héroe. Por ejemplo, tuvo valor en cruzar la cordillera de los andes
aunque nadie creía que podía lograrlo y libertó muchos pueblos. Gracias a la
ayuda de sus ideales pudo completar sus hazañas.
San Martín luchaba
por la libertad, no solo por su libertad sino por la de todos (Chile, Perú y
Argentina). Para San Martín la patria era la libertad de los pobres, de los que
no tenían hogar, del sufrimiento de las personas que no tenían para comer, la
libertad de los esclavos.